La validación temprana y el emprendedor Gollum
Ni saber las reglas del ajedrez me va a convertir en Judit Polgár (mejor jugadora femenina de ajedrez de la historia), ni compartir tu idea de negocio va a hacer que alguien se te adelante y la lance con éxito.
Tenemos un miedo excesivo a compartir nuestras ideas, nuestra metodología de trabajo, nuestra información. Sin embargo, no hay garantía de que una persona con esa idea, metodología e información consiguiera lanzar un proyecto de éxito.
Este debate no es nuevo, ¿qué vale más la idea o la ejecución?
En Silicon Valley es una práctica común que la gente hable abiertamente acerca de sus ideas de negocio.
¿Por qué se incentiva y valora esta práctica?
Porque compartir tu idea en fases tempranas de madurez te ayuda a confirmar si es tan buena como pensabas o no. Es lo que se llama validación temprana y puede llevarse a cabo de muchas formas en función de cómo de evolucionado está la idea: conversaciones con personas pertenecientes al público objetivo, encuestas, test con usuarios usando prototipos de baja definición, etc.
Como emprendedor (y puede haber emprendedores también dentro de grandes corporaciones) nunca debes aferrarte a tu idea, debes evitar convertirse en el emprendedor Gollum. Sí, el de El Señor de los Anillos, ese emprendedor que se aferra a su idea como Gollum lo hace al anillo de poder.
La información y las ideas son mercancías
El éxito empresarial rara vez es fruto de una idea extraordinaria, sino de la combinación de una excelente idea con una excelente ejecución.
Existen grandes marcas que no inventaron nada: ni google fue el primer buscador ni idealista fue el primer portal inmobiliario en España. La idea no siempre debería ser crear algo que no exista. Mejorar o buscar el diferencial con algo ya presente en el mercado puede ser la clave.
En Flat 101 compartimos nuestra metodología, estudios de conversión, estudios sectoriales, conocimiento, etc. desde nuestro Innovation Hub sin preocuparnos en absoluto que por ello haya otros que puedan aventajarnos.
En un contexto de libre acceso a la información, las ideas son tan solo mercancías (commodities).
Ideas are commodities. Execution of them is not
Michael Dell (fundador y CEO de Dell Inc.)
Michael Dell (fundador y CEO de Dell Inc.) dijo una vez: «ideas are commodities. Execution of them is not»
Estrategia y ejecución, la combinación ganadora
Desde mi punto de vista, tu gran idea lo será tanto como tu capacidad de llevarla a cabo. Tu gran capacidad de ejecución te dará tantos beneficios como buena sea la idea en la que has invertido tus esfuerzos.
Esta técnica se utiliza en program management (gestión de programas) dentro de las organizaciones, donde a la hora de elegir los proyectos que llevar a cabo en las organizaciones se evalúa tanto la idea como la capacidad de ejecución de tiene esa organización en base a la complejidad de la tecnología, experiencia previa dentro de la organización, capacidad de gestión, etc.
La gestión de programas persigue que las organizaciones únicamente inviertan dinero en las ideas adecuadas, aplicando una gestión excelente.
Esto se ha convertido en mi misión profesional desde que me especialicé en la gestión empresarial: “Getting the right things done”, “Hacer que las cosas correctas, se hagan (sucedan)”.
En este mantra se aúnan dos cosas que me apasionan, la estrategia y la gestión. La estrategia tiene como objetivo localizar y dar forma a la idea correcta en la que invertir los esfuerzos. La gestión garantiza el éxito de la ejecución de esa idea.
Una mala idea perfectamente ejecutada no te dará ningún beneficio. Lo mismo sucede (o peor) con una mala idea mal ejecutada, o con una excelente idea desastrosamente ejecutada.
La próxima vez que te plantees lanzar algo (lo que sea), no solo pienses en cómo de buena es la idea que acabas de tener, sino cuestiónate también cómo de capacitado estás tú o tu equipo para hacerla realidad.
Y recuerda que no estás solo en el mundo, siempre puedes buscar ayuda tanto para validar lo acertado de tu idea/proyecto como para subcontratar la ejecución y gestión del mismo.
Acertar en la idea y atinar en la ejecución garantizan el retorno de la inversión. El resto son falacias o sueños.